La misión de la Fundación Kannonji, creada en el 2022, se centra en la integración de la práctica y la acción social, asociando sabiduría y compasión a través de la práctica de la meditación zen y las enseñanzas de Buda. Nos esforzamos por ofrecer un espacio seguro y de apoyo a quienes buscan cultivar una mente más clara y compasiva trabajando al mismo tiempo por un mundo más justo y sostenible.
Asimismo, deseamos promover un compromiso social activo. Consideramos que las enseñanzas de Buda nos llevan a comprender la interconexión de todos los seres y nos incitan a trabajar por el bienestar común de la humanidad y el planeta. Por ello, nos esforzamos en realizar un aporte beneficioso a la sociedad a través de iniciativas comunitarias y proyectos de servicio social.
En un momento en que el mundo exterior se enfrenta a retos que amenazan la vida de nuestro planeta, toda actividad espiritual, compasiva y pacífica tiene una importancia existencial. Es primero en el corazón donde podemos encontrar nuestra verdadera morada y trasladarla al mundo.
Dentro del budismo existen varias ramas y una de ellas es el Soto Zen, de cuyo linaje ancestral hace parte la Fundación Kannonji, una línea de maestros que ha transmitido las enseñanzas del Buda a través de distintos continentes, siendo Francia el país a donde llega Taisen Deshimaru en 1967, discípulo de Kodo Sawaki en Japón y enviado por este para que enseñara la práctica del Zen en un momento muy convulsionado y con una enorme necesidad de orientación espiritual. Fue así como se fueron formando en occidente maestros que han sembrado la semilla en distintos territorios de Europa y Latino América entre ellos Etienne Mokusho Zeisler, Stephane Kosen Thibaut, Ivon Myoken Bec, Keisen Vuillemin y Shogetsu Avila.
La Ryukai Sangha y la Fundación Kannonji perpetúan la memoria y el espíritu de la enseñanza de Etienne Mokusho Zeisler.
Para llegar hasta nosotros bajo la forma del Zen, el budismo ha pasado por cuatro grandes periodos, incluido el actual: el budismo indio, el chan chino, el Zen japonés y ahora el Zen en nuestra sociedad occidental, donde ya no es una religión ligada al nacimiento, sino a su práctica.
En la India, desde el despertar y la enseñanza de Buda 2500 años antes de nuestra era, el budismo experimentó su primera revolución con el advenimiento del Mahayana. La persona de Shakyamuni tomó con el apelativo de Buda (que significa El Iluminado) una extensión universal más allá de la persona, una esencia cuasi divina expresada por sus tres cuerpos: cuerpo encarnación, cuerpo despertar y cuerpo Dharma. El budismo Mahahyana nos conecta así con lo que está más allá de nosotros y nos abre a la unidad con todos los seres en la compasión y la fe.
Desde mediados del siglo I d.C., el budismo llegó a China a través de la Ruta de la Seda. Bajo la influencia preponderante de la filosofía taoísta, no sólo cambió, sino que se convirtió en una práctica arraigada en la vida cotidiana y el tejido social.
El chan presta una aguda atención al despertar del momento y al espíritu de la realidad; a menudo es incluso mordaz. El periodo dorado del Chan floreció durante la dinastía Tang, entre los siglos VI y X, época que vio florecer a los más grandes maestros de esta forma china de budismo.
En nuestro linaje el Zen Soto nació en Japón, tras el viaje a China de Dogen, un monje japonés. La enseñanza de Nyojo, un maestro Chan, a Dogen, tuvo un profundo efecto en la continuación de la práctica del Zen, no sólo en Japón, sino también en Europa hasta nuestros días. La práctica de la meditación sentada y en silencio, Zazen, se convirtió en el elemento central del Zen y en el ancla del camino espiritual Zen. A principios del siglo XX, Kodo Sawaki dio inicio a un renacimiento de la práctica de la meditación sentada en silencio y revolucionó el panorama del Zen al enseñarla a laicos fuera de los templos tradicionales.
El Lugar
El dojo de La Fundación Kannonji está dirigido por la Maestra Shogetsu Avila, ordenada monja en 1993 siguiendo la enseñanza del Maestro Keisen Vuillemin en el dojo de Ginebra. Shogetsu recibió la transmisión del dharma del Maestro Yvon Myoken Bec en el Templo Taisen-ji y Hobo-ji en Hungría el 9 de junio de 2016.
El Dojo está abierto a todos aquellos que deseen practicar la Vía del Zen. Inicialmente los invitamos a participar a una sesión de iniciación a la practica en la cual explicamos los puntos de la postura, la respiración y la actitud mental que acompañan la práctica. A partir de ahí es posible participar a la sesión de Zazen junto a todos los practicantes en el dojo.
La Fundación Kannonji está vinculada a la Ryukai Sangha de Suiza, así como a la Mokusho Zen Hàz de Hungría y Rumanía y otros centros de practica en Europa y Latinoamérica.
La Comunidad
Aunque nos sentemos solos frente a la pared, y por tanto frente a nosotros mismos, practicar juntos un camino espiritual evita que éste se vea empañado por el egocentrismo. En un dojo, cada uno se esfuerza por encontrar la armonia con los demás, abandonando su ego para seguir los horarios y las reglas inherentes a la comunidad y respetando la atmósfera delicada y silenciosa que reina allí. Practicar el Zen toda la vida requiere una gran determinación y una fe inquebrantable.
El apoyo de los compañeros de la Vía, con los que nos encontramos regularmente en el dojo, es una ayuda preciosa para la práctica de Zazen.
Por otra parte, en un dojo es posible beneficiarse de la enseñanza de un maestro certificado por todo un linaje de Patriarcas. Práctica y comprensión van de la mano; por lo tanto, es más fácil entrar en la dimensión religiosa y espiritual del Zen con la ayuda compasiva de un maestro que conoce el camino.
Horarios de practica
Zazen: Sábado 9h00 am
Miércoles 6h30 am
Periódicamente - jornadas y medias jornadas de practica en Bogotá
Kannonji Zendo Bogotá
Calle 42 # 25 – 25 Barrio La Soledad
Retiros de meditación intensivos – Sesshin
Compromiso social
La misión de la Fundación Kannonji, creada en el 2022, se centra en la integración de la práctica y la acción social, asociando sabiduría y compasión a través de la práctica de la meditación Zen y las enseñanzas de Buda. Nos esforzamos por ofrecer un espacio seguro y de apoyo a quienes buscan cultivar una mente más clara y compasiva trabajando al mismo tiempo por un mundo más justo y sostenible.
Asimismo, deseamos promover un compromiso social activo. Consideramos que las enseñanzas de Buda nos llevan a comprender la interconexión de todos los seres y nos incitan a trabajar por el bienestar común de la humanidad y el planeta. Por ello, nos esforzamos en realizar un aporte beneficioso a la sociedad a través de iniciativas comunitarias y proyectos de servicio social.
En un momento en que el mundo exterior se enfrenta a retos que amenazan la vida de nuestro planeta, toda actividad espiritual, compasiva y pacífica tiene una importancia existencial. Es primero en el corazón donde podemos encontrar nuestra verdadera morada y trasladarla al mundo.
FUNDACION KANNONJI
Ecología del espíritu para la Paz
Un lugar donde la educación contribuye a la transformación para la paz.
Un centro donde lo espiritual, LAS ARTES, la naturaleza y el compromiso social participan en la construcción de UN ECOSISTEMA HUMANO QUE PERMITA EL LIBRE DESARROLLO EN ARMONIA de cada persona en la comunidad.
Hace tiempo ya que de manera individual o a través de colaboraciones con otras personas u organizaciones, nosotros hemos estado trabajando por llevar nuestras competencias al servicio del bien social. Hoy deseamos unir nuestras fuerzas y entusiasmo para continuar obrando a la construcción de una sociedad sana, despierta y responsable en el seno de la Fundación Kannonji.
Algunos de nuestros trabajos
Iniciación a la práctica de zazen una vez al mes
Zazen - Sábado 9h00 am, Miércoles 6h30 am
Calle 42 # 25 – 25 Barrio La Soledad
Periódicamente - jornadas y medias jornadas de practica en Bogotá
Retiros de meditación intensivos – Sesshin.
Cel 315 566 56 43